Cuando usamos la notebook es muy importante verificar cómo y dónde la estamos utilizando. Por ejemplo, colocarlo en la cama sobre la manta o las sábanas es una pésima idea. Lo mismo que colocarlo sobre un almohadón. El problema es que, al estar apoyado sobre una superficie blanda, las rejillas de entrada y salida de aire generalmente se obstruyen impidiendo el flujo de aire y agravando cada vez más el problema del calentamiento del equipo.
Por eso, si tenemos que trabajar con la notebook en la cama o el sillón, tendremos que utilizar siempre una superficie lisa y dura, como por ejemplo una bandeja, que mantenga abiertas las rendijas de ventilación.
Nuestra bandeja Rosqui, evita que se sobrecaliente la notebook, se mantiene nivelada sobre tus piernas e impide el calor e irradiación del equipo sobre tu cuerpo.